Parasomnias

Son trastornos que se caracterizan por alteraciones conductuales y se acompañan de síntomas fisiológicos o vegetativos.

De acuerdo con la tercera clasificación internacional de trastornos del sueño, las parasomnias se clasifican en:

Parasomnias relacionadas al sueño NO REM.
Parasomnias relacionadas al sueño REM.
Otras parasomnias.

Parasomnias relacionadas al sueño NO REM

Son alteraciones que alteran el sueño NO REM, las cuales se manifiestan como despertares parciales. Adicionalmente, son más frecuentes en niños que en adultos, se genera amnesia o no hay recuerdo del evento y durante los episodios del despertar pueden ocurrir conductas automáticas simples o complejas.

Despertares con confusión.
Sonambulismo.
Terrores nocturnos.
Trastorno de alimentación nocturna.

Despertares con confusión

Con base en la “Guía de práctica clínica sobre trastornos del sueño en la infancia y adolescencia de atención primaria” (2011), Los despertares confusionales o con confusión consisten en unas condiciones del sueño profundo, de carácter benigno, mediante las cuales éste es interrumpido. Al mismo tiempo, son más frecuentes en niños que en adultos.

Ahora bien, dentro de los síntomas que presentan los pacientes con esta patología están:

Levantarse de manera brusca.
Desorientación del espacio y tiempo.
Confusión.
Problemas para comprender la situación y el entorno.
Dificultades para utilizar la lógica.

Por último, estos episodios suelen durar minutos.

Sonambulismo

Con base en la “Guía de práctica clínica sobre trastornos del sueño en la infancia y adolescencia de atención primaria” (2011), el sonambulismo es un trastorno que se manifiesta mediante la realización de conductas aprendidas durante los estados de vigilia pero ocurren durante el proceso de dormir, y suele ocurrir con mayor frecuencia en la infancia.

Por otro lado, el sonambulismo se ha asociado a interrupciones en el proceso de dormir y otros trastornos de sueño, estrés, fiebre, consumo de medicamentos, sustancias y otras enfermedades.

Por favor, vea el siguiente vídeo, del Hospital Sunnybrook, donde explican el sonambulismo y muestran casos: https://www.youtube.com/watch?v=R17hC5UMD-0

Terrores nocturnos

Siguiendo la “Guía de práctica clínica sobre trastornos del sueño en la infancia y adolescencia de atención primaria” (2011), los terrores nocturnos hacen referencia a un trastorno que se caracteriza por episodios de despertares bruscos, los cuales pueden durar varios segundos o minutos. Al mismo tiempo, son más frecuentes en la niñez y pocas veces se observa en la edad adulta.

Ahora bien, los síntomas de esta patología son los siguientes:

Gritos fuertes e intensos.
Sentarse en la cama durante minutos.
Tener los ojos muy abiertos y con mirada fija.
Comportamientos bruscos como patear, levantarse rápidamente o lanzar objetos.

Vea el siguiente vídeo del programa “THE FEED”, en el cual se reporta el caso de una paciente con terror nocturno: https://www.youtube.com/watch?v=YFMqF26UTy4

Trastorno de alimentación nocturna

Con base en Martínez – Salio y colegas (2007), es un cuadro clínico en el cual la persona necesita consumir grandes cantidades de alimentos después de cenar y antes de ir a dormir, o incluso puede despertarse por hambre. Adicionalmente, al día siguiente puede no tener hambre, debido a que el sistema gastrointestinal no quema la comida, generando un aumento de peso.

Dentro de la causas del trastorno, se encuentran:

Obesidad.
Bulimia.
Ansiedad.
Horarios de ingesta no adecuados.

Parasomnias relacionadas al sueño REM

Son alteraciones que ocurren el sueño de movimientos oculares rápidos, las cuales pueden ocasionar un despertar en la persona, puede acompañarse de síntomas fisiológicos o vegetativos y hay conciencia del evento.

Pesadillas.
Parálisis de sueño.

Pesadillas

Siguiendo la “Guía de práctica clínica sobre trastornos del sueño en la infancia y adolescencia de atención primaria” (2011), las pesadillas son experiencias oníricas aterradoras, las cuales pueden generar despertares en la persona con o sin síntomas de ansiedad, sudoración, palpitaciones, etc.

Generalmente, son más frecuentes en niños que en adultos. Adicionalmente, se consideran una patología para intervenir cuando ocurren muy seguidamente, y también si generan dificultades con las funciones cognitivas, fatiga, problemas para volver a dormir, fobia, etc.

Parálisis de sueño

Con base en Olunu y compañeros (2018), la parálisis del sueño es un trastorno que genera un despertar deliberado durante la etapa de movimientos oculares rápidos y se acompaña de síntomas como:

Dificultades para respirar.
Sensación de miedo.
Alucinaciones visuales: ver a alguien en el lugar donde están, personas, sombras, etc.
Alucinaciones auditivas: escuchar cosas que no existen, voces, golpes, pisadas, cosas que se tiran o rompen, llantos, etc.
Alucinaciones táctiles: percibir sensaciones como levantarse o incluso flotar, caerse de la cama, hormigueo, que alguien toca el cuerpo, les ataca, abusa sexualmente, etc.

A continuación, vea el siguiente vídeo, de National Geographic, sobre parálisis del sueño: https://www.youtube.com/watch?v=PCZSAwSasdQ

Otras parasomnias

Hace referencia a otra categoría de las parasomnias, en la cual estos tipos de trastornos no cumplen los criterios de los demás.

Enuresis nocturna.

Enuresis nocturna

Con base en Úbeda y Martínez (2012), es un trastorno que se caracteriza por una micción involuntaria durante el proceso de dormir. Asimismo, es una condición que no genera consecuencias graves, pero puede impactar emocionalmente en el niño, por lo cual si se presenta esto, se debe acudir a un pediatra y/o psicólogo para tratar la propia enfermedad, ya sea con medicamentos, intervenir en otras patologías que puedan generar el evento y un cambio de hábitos como beber mucho líquido que pueda generar el mismo en los menores.

Por favor, observe el siguiente vídeo del Instituto Neurológico de Colombia, sobre las pesadillas y terrores nocturnos en niños(as): https://www.youtube.com/watch?v=3ck9emmWAD0&list=PLOWs2rcszYXGAicoJLAlU0HNhYXjn5AA5&index=4