El análisis de casos

Este tipo de examen no esta diseñado para evaluar cuánto conoces, sino para probar tu habilidad para enfrentarte a una situación que simula la realidad. Es una forma de evaluar cómo piensas, en tanto que usas tus conocimientos para resolver la situación. Para tener éxito con este tipo de preguntas, es imprescindible que durante tu estudio hayas practicado mucho.

 

El análisis de un caso consiste en resolver preguntas relacionadas con un ejemplo real que te van a aportar. Pueden mostrarte una imagen (una foto o ilustración) o una gráfica, o darte información sobre un supuesto práctico específico, y seguidamente te harán preguntas relacionadas con ese tema. Pensando en este tipo de preguntas, por esto es importante que durante tu estudio practiques con modelos, mapas, gráficas y dibujos y, si se trata de problemas, que practiques. A continuación te pondré algunos ejemplos, en diferentes asignaturas, para que te hagas una idea de cómo podría enfocarse:

• En un examen de Historia del Arte, pueden darte la foto de una pintura y a continuación hacerte preguntas sobre el estilo del autor. Evidentemente, para responder debes saber quién fue el autor, pero lo realmente importante es que identifiques los elementos de su estilo en el cuadro que te están enseñando. No te van a puntuar más por mencionar elementos de su estilo que no estén presentes en la imagen.
• En un examen de Geografía o de Ciencias de la Tierra, pueden ponerte un mapa meteorológico y preguntarte por las condiciones climáticas en ese momento. Debes fijarte bien en los datos numéricos y gráficos (dirección y velocidad del viento, presión atmosférica, temperaturas, etc.) y localizar patrones en diferentes partes del mapa.
• En un examen de Física, pueden enseñarte una gráfica de movimiento de un objeto y hacerte preguntas sobre el tipo de movimiento. En este caso, lo primero, siempre, es identificar las variables (X e Y) y cuál es el punto de referencia del movimiento. A continuación, relaciona la dirección y pendiente de la gráfica con el sentido y velocidad/aceleración del movimiento en cuestión, respectivamente.
• En un examen de Biología, pueden ponerte una ilustración de una célula llevando a cabo un determinado proceso metabólico, y preguntarte que identifiques el proceso. Es importante que te fijes en la forma de los dibujos que tienes delante, y de dónde salen y a dónde se dirigen los diferentes elementos. Relaciona esos "relatos" con los que tú recuerdas de haber estudiado.

 

Problemas

Un problema es un tipo de pregunta particular dentro de los análisis de caso, que se caracteriza por la necesidad de hacer cálculos matemáticos para resolverlo. Efectivamente el resultado final es importante, pero no lo es todo. Puedes tener un resultado correcto al que hayas llegado siguiendo un desarrollo erróneo, por "casualidad" (digámoslo así). También puedes tener un resultado erróneo debido a un fallo de cálculo, y obtener la puntuación casi completa, siempre que el desarrollo de la respuesta esté bien hilado. Por eso es importante que sigas recomendaciones que usaste al practicar durante tu estudio; te las recuerdo y te explico por qué son importantes también en un examen:

1. Conforme vayas leyendo la información del enunciado, ve elaborando en el espacio de respuesta una tabla de datos, en la que sintetices TODA la información que te dan. Anota la magnitud (por ejemplo, diámetro, velocidad, etc.), el valor y la unidad en que está expresada, para mostrar que efectivamente entiendes la información. También es recomendable que en esa tabla de datos incluyas la variable (o variables) por la que se te pregunta.
2. Siempre que el tipo de problema lo permita, trata de hacer una representación gráfica del mismo, con un dibujo o un diagrama de la situación que se te presenta. Visualizar te ayudará a convertir esos datos abstractos en una situación real, y quien evalúe el examen se dará cuenta de que efectivamente has entendido la situación del problema.
3. Añade la fórmula (o fórmulas) que consideres que te van a servir para resolver el problema. Haciendo esto, demostrarás que tienes los datos más organizados para empezar.
4. Sigue un orden en el desarrollo del problema, de izquierda a derecha y de arriba hacia abajo. Así guiarás a quien corrija tu examen, y no tendrá que estar buscando los cálculos.
5. Asegúrate de que el resultado está claramente diferenciado. Puedes usar un recuadro, rodearlo, etc. Quien te evalúe, así sabrá dónde termina la respuesta y, también, que tú sabes que ahí termina.
6. Revisa toda tu respuesta, por si acaso hay algún fallo que ha pasado desapercibido.