Primer argumento que la gente utiliza para no realizarse: No tengo dinero
“NO TENGO PLATA”
Esta es una de las excusas más comunes que las personas utilizan para inmovilizarse y frustrar un futuro lleno de posibilidades y de desarrollo. Las excusas adquieren diferentes matices y toman cualquier forma con el único propósito de cumplir con su objetivo, evitar que usted sea de esa clase de individuos que sea una muestra evidente que en este mundo, SÍ se pueden lograr las cosas.
Usted tiene tres salidas cuando de sus bolsillos lo único que sale son sus manos después de haberlas metido allí para notar lo de siempre: que están “VACÍOS”.
Salida Número Uno: SUICIDARSE. Alguna vez pasando por un puente y ver lo alto que estaba del suelo me pregunté cómo había gente que se lanzaba desde tan gran altura, porque ese puente definitivamente ni siquiera para el más “valiente” de los desesperados.
Salida Número Dos: ROBAR. Mucho cuidado con esta opción. Puede salir confundido al lanzarse con una pobre víctima que resulte ser la re encarnación de BRUCE LEE, o la versión criolla de JEAN CLAUDE VAN DAME y lo deje desanimado por dedicarse a esta pobre opción.
Salida Número Tres: SER PARTE DE LA SOLUCIÓN. Lo más fácil que un ser humano puede hacer es abandonar, esa es la salida del cobarde. Pero usted que tiene proyectos y que desea llevarlos a la realidad debe saber que hay que ponerle la cara al viento y levantar vuelo.
Así que tenga en cuenta lo siguiente:
- Las ideas no tienen costo, pensar es gratis y no duele. Toda empresa que usted ve aunque no lo crea tuvo un inicio y ese comienzo tuvo su base en una simple idea, en un simple pensamiento que vagaba y vagaba por la mente de alguien, imágenes que iban y venían en una mente que no dejaba en paz al individuo que las consintió y que no las desechó.
Tenga en cuenta que Las ideas entre más sencillas mejor. En primera instancia porque son más fáciles de realizar, lo que le dará la opción de moverse sintiéndose más cómodo y no se sentirá abrumado por la grandeza de un compromiso que en un momento determinado no podrá realizar.
- No se complique. No crea que por más compleja la idea es más seria o tiene mayores posibilidades de tener éxito. No se engañe. Más bien si usted en este momento no cuenta con los recursos suficientes para iniciar un nuevo proyecto de gran envergadura, mal hace al embarcarse en una propuesta empresarial inicial por la que usted no pueda responder porque necesita de una alta inversión según su sabiduría empresarial para poder comenzar. No es más una organización de millones, que otra que apenas comienza con unos apuntes.
Ahora, si de hecho su aspiración es tener una pequeña empresa como IBM, SURAMERICANA DE SEGUROS, DAVIVIENDA, LIBRERÍA PANAMERICANA, TV CABLE, Almacenes ÉXITO, NIKE, COCA – COLA recuerde que su idea debe fraccionarla tantas veces como sea posible para que el primer paso que deba dar sea lo más cómodo de alcanzar y esto le permita ir avanzando con tranquilidad sin que los siguientes pasos sean tan complicados que sean imposibles cumplir.
Tenga en cuenta que toda gran empresa empezó con un primer y sencillo paso. Alguien deseaba tener simplemente una pequeña tienda de barrio y con el tiempo terminó con una cadena de autoservicios. Sino que lo diga la WALT DISNEY COMPANY. Increíble que una empresa de tan gran envergadura como esta haya dado inicios todo en manos de un ratoncito.
Creo que para el Señor TITO LIBIO CALDAS fundador de LEGIS S.A. le hubiese sido imposible tener esta multinacional colombiana como es hoy desde el primer día. Tener unos músculos desarrollados necesita de mucho trabajo. Para ello es tan sencillo como comenzar un programa de ejercicios preguntándole a un experto en el tema qué debe hacer.
- Dee Hock dijo, “El problema no radica en tener pensamientos nuevos e innovadores, sino en deshacerse de los viejos” Existe un pensamiento muy arraigado respecto a la “doctoritis” que sufren muchos y dados estos condicionamientos limitan sus conductas restringiendo sus posibilidades de desarrollo empresarial. Por ejemplo, hay muchos que si no es detrás de un escritorio, sino es con carro último modelo, sino es presidente de la compañía, o gerente, sino es con un sueldo de ocho (8) cifras, sino tienen poder y así poder GOBERNAR a un grupo de personas, sino es en una empresa que goce de un alto grado de aceptación en el medio no les sirve. Al parecer estos personajes no quieren desarrollar un proyecto empresarial, lo que buscan es estatus y aceptación social, así lo nieguen.
Les da pena, vergüenza iniciar un increíble negocio por el principio. Jamás se pondrían un delantal o venderían algunos productos o servicios, jamás atenderían público porque eso los hace sentir ridículos. Piense que “no hay empresas pequeñas, sino empresas grandes empezando a crecer”
Usted puede comenzar vendiendo rosas y terminar con una cadena de floristerías, pero le guste o no, tiene que empezar vendiéndolas.
- No se endeude. Por ese tipo de pensamientos esquemáticos que induce a conductas erróneas en el mundo de los negocios hay muchos individuos que inician un negocio, endeudándose. Si su idea es generar ingresos porque desea gozar de unos recursos, mantenga al mínimo sus gastos (egresos). No asuma compromisos económicos que no son necesarios por el momento. Me sorprende la cantidad de gente que fracasa con ideas de negocios potencialmente interesantes, que terminan con deudas que antes no tenían, con dolores de cabeza innecesarios, diciendo que ese negocio no era bueno por decisiones erróneas y por el afán de tomar atajos en un mundo donde a gritos se nos dice que los atajos no traen nada bueno. Respete los procesos, primero fue lunes que martes.
La gente asume responsabilidades de oficina, dotación de la misma, contratación de personal y tantas cosas más en un negocio que aun no ha comenzado a producir y sin respaldo financiero. Si bien hay cosas en las que hay que invertir, solamente asuma cosas que sean estrictamente necesarias. El mismo negocio en la medida que vaya creciendo irá dando para las cosas que su mismo negocio irá pidiendo.
Un vehículo nunca arrancará en quinta. A medida que avance el carro necesitará que vaya dándole nuevos cambios. Todo en su momento.
- Valore la Experiencia tanto la suya como la ajena. Para aquellos que dicen que no tienen experiencia les comento que hay actividades en las cuales todos nos desenvolvemos fácilmente. Para algunos serán las manualidades, para otros el dibujo y para unos más las ventas. Aproveche eso. Procure realizar actividades empresariales que tengan que ver con esos temas que a usted le apasionan y si su actividad empresarial es nueva para usted, hágala desde las realidades que a usted le gustan mucho.
Por otro lado, antes de iniciarse en un negocio o actividad que sea nuevo para usted, consulte sin pensarlo a personas sabias que ya han tenido éxito en emprendimientos similares al suyo. Si le pregunta a gente propositiva, entusiasta, proactiva su ayuda resultará sin duda de mucho provecho.
- Pague el Precio. Tome a bien esta reflexión. Es necesario comprender que “nada grande en la vida viene fácil”, es decir, sentado mirando para el techo no va a lograr nada. Es fundamental que filtremos en nuestro entender que debemos armarnos de una dosis de paciencia, tenacidad y mucha disciplina. Como también claridad de objetivos y organización. La permisividad y la comodidad los únicos resultados que traen es el estancamiento y la frustración. La grandeza interior y el desarrollo exterior no son gratis. Pregúnteles a los que están acostumbrados a andar por las cimas. Sus vidas están llenas de ascensos “constantes”.
- Todos los negocios en su inicio no necesitan de inversión. TODOS. Y para que quede claro, insisto, en sus primeros pasos NO NECESITAN INVERSIÓN. Sólo necesita una idea y eso no tiene ningún costo, un proceso de reflexión que de cómo resultado un planificación que fraccione tanto su objetivo a largo plazo que su primer paso sea muy sencillo de dar, y eso tampoco requiere de dinero sólo pensar una hoja y un lápiz, estar dispuesto a lanzarse a la acción y ser perseverante. Y esto tampoco necesita de dinero. Creo que lo más difícil es bajarse de la nube, dejar de ser tan complejos y apelar a la simplicidad, a ser menos esquemáticos y asumir un nuevo esquema de pensamientos. Eso sí que vale pero no dinero sino mucha fuerza de carácter.