Claves perceptivas secundarias- borrosidad y desenfoque
La borrosidad es la falta de convergencia de la visión binocular. Esta carencia de ajuste es la que produce el desenfoque y la falta de nitidez de una forma u objeto. También un solo ojo es capaz de enfocarse en un punto u objeto, pero puede suceder que se descentralice o se disperse sin poder enfocar porque el cristalino debe contraerse y distenderse.
Al mirar al infinito, o a una zona intermedia, veremos que el espectador tenda esa mirada perdida ya que se enfoca en esas forma borrosas e indefinidas. El ojo es incapaz de ver la nitidez en los objetos que se encuentran distantes, siendo ésto una limitación fisiológica del ser humano.
El ojo también es incapaz de ver lo cercano y lo lejano a la vez. Para ver ambas distancias la visión se debe reajustar. Con este ejercicio de reajuste se logrará ver imágenes en 3D pero no funciona para las pinturas. Entonces el ojos solo se fijará en lo que es claro y nítido.
La característica de la vista es que sobrepasa a los objetos cercanos a nosotros, los cuales veremos borrosos, y se posará en objetos que están algo más alejados de nuestra visión, los cuales se notarán los detalles. Como sucede cuando usamos lentes, las cuales no nos fijamos en el vidrios sino en lo que vemos a través de ellos.
Es típico el error de los recién iniciados en la pintura (principiantes) darle el mismo enfoque a todos las figuras que representa en su lienzo. No es fácil comprender que cuando uno se enfoca en un objeto, todo lo demás se verá borroso.
Si pintáramos un paisaje a través de una ventana, habrá que optar que clave elegir, si sacrificar al paisaje en pro de lso detalles del vidrio de la ventana, o darle importancia al paisaje sacrificando al vidrio, porque no se le puede dar la misma importancia a ambos a la vez.