Amor a sí mismo
Amarse a sí mismo no es ninguna señal de egoismo ni tampoco excluye el amor a los demás, ambos están íntimamente ligados. La persona egoista, además de no amar a los demás es incapaz de amarse a sí misma (Fromm E., 2007).
Con este amor el autor se refiere al amor que uno se tiene a sí mismo, aquellos sentimientos y emociones de satisfacción y seguridad que uno mismo siente cuando se siente emocionado porque está contento con cómo lleva su vida. El amor a sí mismo, es un amor necesario e interesante de análisis puesto que depende en gran medida de cómo nos comportaremos en nuestra vida.
Es decir, esta categoría de amor es la que estaría íntimamente relacionado con la autoestima de las personas. La capacidad de vernos positivamente a nosotros mismos, como capaces de desenvolvernos en la vida, de afrontar los problemas y también con el autoconcepto físico. Esto depende íntimamente con la buena salud psicológica puesto que cuando tenemos “poco amor propio” o una autoestima baja, no somos capaces de afrontar muchos problemas con los que nos encontramos en la vida y esto nos hace ser muy vulnerables hacía problemas psicológicos y físicos.
Como conclusión final podemos determinar que el amor a sí mismo, tiene que ver con la autoestima y el autoconcepto que uno tiene de sí mismo. Es necesario fomentarlo, ya que sin una determinado amor a sí mismo las personas no podremos tener una buena salud física y psicológica.