No todos quieren jugar
NO TODOS QUIEREN JUGAR
No debemos olvidar que existe la posibilidad de que alguno de los participantes no quiera jugar.
Los motivos pueden ser varios:
Quizás sea recién llegado al grupo, ser tímido, o necesitar de nuestra atención o afecto. Si no participa en los juegos, no será muy bueno al principio forzarlo a hacerlo.
Si el factor predominante, según tu criterio, es la timidez, proponle espacios diferentes de juego. En el sentido de que, su participación, inicialmente, no lo exponga tan bruscamente a los demás. Respeta ese tiempo tan delicado.
Si algún participante no presta atención, o notas que lleva un tiempo de comprensión diferente que los demás, entonces es una situación más compleja. Quizás éste sea muy similar a los demás, pero con la diferencia propia de necesitar un poco más de tu apoyo, tu compañía, tu escucha, por lo menos, en ese momento. Ten paciencia y atiende a sus necesidades, tratándolo como uno más del grupo, integrándole de la mejor manera posible.