Actividades sobre agricultura ecológica y sostenibilidad
Para que nuestra huerta escolar sea un lugar responsable, sostenible, pedagógico, saludable, ético y seguro, debemos asegurarnos que seguimos unas pautas básicas que se corresponden con los patrones de la agricultura ecológica.
El método ecológico es una forma de cultivar hortalizas de manera respetuosa con el medio ambiente, por lo que también es respetuosa con nosotros y nosotras mismas.
Debemos tener en cuenta que hay determinados parámetros básicos que debemos respetar para no dañar el terreno y obtener frutos saludables y sabrosos:
- La rotación de cultivos.
- Aprovechamiento de los recursos locales.
- Cultivo de las variedades locales y autóctonas.
- Lucha ecológica frente a las plagas y enfermedades de las plantas, por ejemplo utilizando las plantas compañeras como son gran cantidad de la familia de las aromáticas.
- Ahorro de agua.
- Fomento de la biodiversidad.
- Rechaza el uso de productos químicos tales como fungicidas, herbicidas, abonos químicos, etcétera.
- No tolerar el uso de OMG (organismos genéticamente modificados).
A continuación os propongo una actividad indicada a partir del 2º ciclo de educación primaria hacia adelante. Recordad que como educadores y educadoras debemos adaptar las actividades al grupo que vayan dirigidas.
Esta actividad consiste en la visualización del pequeño vídeo titulado “Dos tomates y dos destinos”. Podéis visualizarlo a continuación:
Una vez visto el corto, la idea es hacer un vídeoforum para identificar:
- Tema principal.
- Diferencias entre un tomate y otro.
- Binomio entre las agricultura ecológica y la intensiva.
- Reflexión sobre el consumo de tomates transgénicos.
Así mismo, podemos hacer con nuestro grupo una adaptación del corto y representarlo para el resto de alumnos y alumnas de la escuela, las familias y el profesorado.
Como ejemplo de esta representación os muestro a continuación una adaptación del corto hecho por alumnado de Educación Secundaria:
Para trabajar valores de sostenibilidad, valor muy ligado a la agricultura ecológica, os propongo una actividad a desarrollar principalmente con alumnado de 3er ciclo de Educación Primaria.
Este juego es una adaptación del juego que aparece en la Unidad Didáctica “El Huerto Escolar Ecológico” de Alimentacción (Red de escuela por un mundo rural vivo).
La actividad se desarrollaría en una sesión. Necesitaremos unas fichas blancas y rojas, (fichas que pueden ser elaboradas por los niños y niñas con piedras pintadas o forradas) y bolsas de tela.
La organización de juego comienza con la formación de grupos, cada uno de ellos formados por cuatro personas. A cada uno de estos grupos se le asigna el nombre de “comunidad” y son ellos y ellas las que se pondrán el segundo nombre, por ejemplo “Comunidad Alegría”.
A cada “comunidad” se le da una bolsa de tela con 16 piedras blancas. Y a cada persona de cada grupo se le da un puñado de piedras rojas.
Ahora cada grupo debe elegir un escenario determinado en lo referente a la cultura del lugar. En cada uno de los escenarios que proponemos un recurso queda dañado (agua, suelo, plantas, bosques...).
Los cinco escenario son los siguientes:
- Escenario 1: hay un terreno cultivado (representado por las piedras blancas) pero hay presencia de fertilizantes, herbicidas y pesticidas.
- Escenario 2: las piedras blancas son un terreno donde se pastorean animales, y las piedras rojas son la pérdida de vegetación y el exceso de estiércol de los animales.
- Escenario 3: este escenario es el de un barco pesquero, representado por piedras blancas, y las piedras rojas es el aumento de otras especies.
- Escenario 4: las piedras blancas son los viajes en avión y las piedras rojas la contaminación producida por estos trayectos.
- Escenario 5: las piedras blancas son los productos hechos en las fábricas y las piedras rojas son la contaminación producida en estas fábricas.
El desarrollo del juego es el siguiente:
Cada “comunidad” ya tiene asignado un escenario en particular. Ahora se meten las piedras rojas y blancas en una bolsa de tela.
En el primer turno, cada participante sacará de la bolsa de tela tantas piedras como quiera, pero sin saber el color de las mismas. Para seguir participando, es un requisito imprescindible que en cada turno cada participante saque al menos una piedra blanca.
Al final de la ronda se cuentas las piedras blancas que han quedado en la bolsa y se agregan el mismo número de blancas a la bolsa otra vez.
La 1ª y 2ª ronda representan el presente y por cada piedra blanca de cada participante se añade una roja a la bolsa.
La 3ª y 4ª ronda representa la generación siguiente, es decir, la de nuestros hijos e hijas. Y por cada piedra blanca se ponen 3 rojas en la bolsa.
La 4ª y 5ª ronda es la generación de los nietos y nietas. Y por cada piedra blanca se añaden inmediatamente 3 rojas a la bolsa.
Ahora es el momento de reflexionar, por ejemplo, sobre el cambio de actitud respecto a la primera ronda y a la sexta.
Reflexionemos al pensar de qué manera los recursos fueron dañados progresivamente.