Propiedades físicas: color
El color es una propiedad física que intrínsecamente no tiene apenas significado sobre el comportamiento del suelo. Su interés radica en que permite inferir otras propiedades, la naturaleza posible de los componente, y la respuesta esperable de las plantas.
Entre la información que se infiere de esta propiedad se puede encontrar:
- Los suelos de color más oscuro, en general, tienen mayor contenido en materia orgánica en comparación con los suelos de colores claros.
- Los suelos amarillos, en general, reflejan cierta condición de humedad excesiva y sin menos fértiles que los suelos pardos comunes.
- Los suelos rojos generalmente son más evolucionados y han tenido una intensa meteorización.
- Los suelos de colores claros o gris claro usalmente tienen un alto contenido de arenas o son calcáreos.
- Zonas azuladas o grises y moteado de color rojizo oxidado indican pobre drenaje y pérdida de buena aireación.
- Colores uniformes a través del perfil es típico de suelos jóvenes.
- Zonas blanquecinas, líneas, redes o moteados en color blanco siguiendo grietas pueden indicar un alto contenido de carbonato cálcico.
Para describir el color se utiliza un código desarrollado por Munsell, posteriormente modificado por Optical Society of America. La descripción se realiza por comparación directa utilizando una tabla de colores.
Utilizando las tablas Munsell se describen los suelos a partir de una superficie de un fragmento, en estado seco y en húmedo. Para ello se humedece la muestra e inmediatamente después de que desaparece la película de agua de la superficie se compara con la tabla.
El color se caracteriza a partir de los tres parámetros básicos (matiz, brillo y croma) que lo componen y cada color puede asociarse a un punto del espacio color, definiendo un sólido de color.