Estudio del suelo en laboratorio
El estudio del suelo en campo se inicia en el laboratorio o en condiciones de gabinete mediante su estudio con herramientas como SIG y teledetección.
Es preciso reunir toda la información bibliográfica posible sobre la zona objeto de estudio mediante mapas de suelos, cultivos y aprovechamientos, geológicos, litológicos, hidrológicos, etc., estudios previos necesarios para cualquier actividad en la zona (naves agrícolas, reforestaciones, etc.).
Toda esta información debe ser ordenada y procesada antes de cualquier toma de decisión, ya que nor permitirá tener una idea previa y servirá para orientar con mayor claridad el estudio.
Posteriormente, junto con el estudio descriptivo de campo, se obtendrán una serie de muestras del suelo, a nivel de horizontes y subhorizontes, que permitirán confirmar y completar la información obtenida en el estudio de campo.
La caracterización del suelo en condiciones de laboratorio puede estructurase en su su estudio mediante técnicas clásicas o mediante técnicas avanzadas.
Laboratorio de edafología
a) El estudio del suelo mediante técnicas clásicas comienza con el secado y tamizado de la muestra, separando el suelo objeto de análisis de los elementos gruesos y restos vegetales.
Muestra de suelo tamizada y elementos gruesos sobrantes.
Dentro de las principales determinaciones que se suelen realizar a un suelo se encuentran:
- Reacción del suelo (pH)
- Prueba previa de salinidad
- Materia orgánica
- Carbono orgánico
- Caliza activa
- Caliza total
- Granulometría
- Clase textural
- Macronutrientes
- Mesonutrientes
- Micronutrientes
- Capacidad de intercambio catiónico
- Aluminio intercambiable.
Existen otras determinaciones que permiten una mayor caracterización del suelo, que se llevarán a cabo en función de las necesidades específicas del estudio que se esté realizando.
Técnicas clásicas de análisis de suelos. Ejemplo: Determinación de la clase textural. Método Bouyoucos.
b) Dentro de las técnicas avanzadas en el estudio del suelo se encuentran aquellas que permiten profundizar en el estudio de la organización del suelo y la naturaleza de sus componentes. Existen técnicas que trabajan con muestras en su estructura original, ya sea en 2D o 3D.
Dentro de estas técnicas se encuentran: el estudio de cortes del suelo con microscopio estereoscópico, con microscopio petrográfico, análisis de imagen, microscopio de fluorescencia, estudios submicroscópicos.
