Ecología del suelo
El suelo es un ecosistema formado por los seres bióticos que en se desarrollan (procariotas, protistas, hongos, plantas y animales del suelo) en interacción con su medio ambiente (agua, aire, minerales, etc.).
En el suelo conviven diferentes organismos, que pueden clasificarse según diferentes aspectos, como son:
- Fuente de energía. Según como obtienen la energía y el carbono para sus funciones metabólicas, los organismos pueden agruparse en productores, consumidores y degradadores.
- Tamaño. Los organismos del suelo se suelen agrupar atendiendo a unos límites un tanto arbitrarios en macrofauna, mesofauna y microfauna.
Los organismos que viven en el suelos, por su diversidad y su capacidad de adaptación a condiciones diversas pueden desempañar múltiples funciones, de gran importancia para el sistema, si bien serán únicamente los organismos activos los que producirán efectos ecológicos debido a su acción que puede ser de dos tipos:
- Acción mecánica:
- Descomposición de residuos y restos orgánicos por fragmentación.
- Bioturbación del material del suelo favoreciendo la mezcla de material orgánico e inorgánico.
- Creación de huecos en el suelo, eficiente en la transferencia de fluidos.
- Diseminación de organismos dentro del suelo.
- Acción química:
- Degradación de compuestos orgánicos a moléculas más sencillas.
- Mineralización y humificación de compuestos orgánicos.
- Síntesis y excreción de productos orgánicos en el suelo.
- Fijación biológica de N2 atmosférico
- Intervención en ciclos biogeoquímicos (C, N, P, Ca, etc.).
- Producción de compuestos biorreguladores, sustancias alelopáticas, acción bactericida, fungicida, etc.