Manejando Emociones
El líder está en una posición donde las emociones se le presentan en todo momento. La gama de las emociones que tiene que manejar van desde las más negativas hasta las más elevadas, y con todas tiene que saber lidiar.
Es sabido que los líderes, a nivel personal están en la mira de todos, y existe el paradigma de que el líder no puede expresar sus emociones frente a su equipo, o revelar sus debilidades ya que podrían ser usadas, más tarde, en su propia contra.
Es la tendencia, a nivel del desarrollo del liderazgo, de practicar la Resiliencia en la mayoría de los casos donde las emociones pueden convertirse en un debilitante para el carácter y la imagen del líder. Tienes que aprender a manejar las emociones y no permitir que las mismas te saquen de tu "centro". Aquí recordamos una vez más la Clave de SOL para ayudarnos a enfrentar situaciones difíciles.
Tienes que ser sensible a tus propias emociones y sentimientos, pero tenemos a su vez que respetar a los demás y no tenemos porqué compartirle tus enfados, frustraciones o tristezas; que bien pueden ser totalmente ignorados por los demás. Así, no haremos sentir incómodos o molestos a los otros con nuestras preocupaciones y problemas.
Un aspecto muy delicado a considerar es el sarcasmo. Muchas veces cuando estamos enfadados y no queremos expresarlo, sonreímos burlonamente ante la situación, y esto puede ser muy insultante y humillante para los demás.
No existe una estrategia definida para el manejo de las emociones, pero tratemos de definir las más comunes que nos pueden ayudar:
- Desvía tu Atención - Esta estrategia es muy efectiva cuando queremos dar por terminada una discrepancia que no se le ve salida. Al desviar tus pensamientos evitas que la emoción agarre más intensidad y se te haga más difícil controlarla. Recuerda siempre que tú eres el piloto de tus pensamientos.
- Evalúa Consecuencias - Las emociones intensas te pueden cegar y hacer que olvides las consecuencias de tus palabras o actos inmediatos. El auto control es vital en estas situaciones, y la frustración, enfado o nerviosismo pasan a un segundo plano cuando recuerdas tus propósitos y metas en la vida.
- Mantén la Calma - Piensa en lo peor que te pueda suceder y te darás cuenta que esta situación también pasará y se olvidará. Esto te ayuda a ver la situación desde otro punto de vista, podrás recuperar el control más rápidamente.
- Haz una Pausa - Tómate un momento de respiro para enfocarte en tu auto control. Ve al baño y enjuágate la cara, tomate un jugo, recuerda la Clave de SOL y si es necesario comete algo que te agrade mucho. Lo importante es que recuperes tu auto control a la mayor brevedad posible.
- Agenda una Tregua - Date permiso para más tarde volver a capitular sobre el asunto, pero más tarde. No quieres suprimir una emoción, solo vas a posponer su análisis y evaluación. Deja que tu mente se "enfríe" para evitar que la emoción coja más fuerza.
- Encuentra la Raíz - Trata de detectar el porqué de la emoción, qué la disparó, qué la impulsó. Para esto tienes que ser muy honesto contigo mismo. Cuando logras desenmascarar tus sentimientos se te hace mucho más fácil identificar y controlar tus emociones.
- Mantén un Diario - Si eres muy emotivo diariamente debes llevar un historial de qué/cuándo/por qué/quién estaba presente cuando tuviste el episodio emocional. Esto te ayudará a reducir la recurrencia de los pensamientos y emociones negativas.
- Recuerda la Clave de SOL - Ten siempre presente tus virtudes y logros, la auto afirmación te llevará a ver otro punto de vista de la situación. Elige ver las cosas de otra manera y recuerda todo lo que has logrado en la vida hasta este momento.
- Haz Silencio - El silencio, la respiración y la meditación están catalogados científicamente como catalizadores de los pensamientos negativos y reductores de ansiedades. Esta práctica se aprende y se perfecciona con el tiempo.
- Mírate al Espejo - Esta acción puede llevarte a auto concienciarte de la locura que estás pensando. Nos amamos y no nos gusta vernos tan desmejorados, así que decides cambiar más rápido. Querrás lucir más sociable y tu semblante cambiará al igual que tu estado emocional.
Si eres capaz de reírte de ti mismo, esa será la solución casi de inmediato de la situación. Como ves, esto es cuestión de adiestrar y conocer tu mente, sentimientos, emociones y tu corazón. Estos temas serán elaborados más intensamente en otros cursos que complementarán el de LÍDER DEL SIGLO XXII.
Para tu participación en el FORO dedícale un ratito a este próximo vídeo y comparte tus observaciones sobre los conceptos que el mismo expone.
Yo soy el capitán de mi mente y YO decido que pensar... --CGR