Prepraramos la tierra
Colocamos un poco de tierra negra en la maceta.
Y aprovechamos para agregar unos cuantos gránulos de abono rico en fósforo y nitrógeno, para evitarle un poco de estrés a la planta por el trasplante.
Con cuidado sacamos la sultana de la bolsa.
Y la colocamos en la maceta.