Discriminación directa e indirecta
Como vimos anteriormente, la discriminación negativa implica una exclusión. Dar un trato desigual a las personas por causas se sexo/género, raciales, religiosas, entre otras muchas.
En la mayoría de los documentos encontramos que se habla de discriminación por razón de sexo. Esto quiere decir que debido al sexo que tiene se discrimina a la persona.
Tras las explicaciones anteriores podemos ver que sería más correcto decir que se produce una discriminación por razón de género, o por razón de sexo- género. ¿Por qué? Porque se discrimina por toda esa construcción que hay sobre los cuerpos.
De forma que aquí hablaremos de discriminación por razón de género o por razón de sexo-género.
Estas discriminaciones no han de ser necesariamente intencionales, sino que en ocasiones son actos que se realizan de forma “automática”, debido a la socialización machista. De forma que esta discriminación tiene un carácter estructural.
Como hemos apuntado, gracias a la legislación hay formas de discriminación que se han ido eliminando, aun así todavía las encontramos. Hablamos, por lo tanto, de discriminaciones directas e indirectas.
La discriminación directa por razón de sexo-género hace referencia a una situación en la que la persona haya sido tratada, o esté siendo tratada en estos momentos, de forma menos favorable que otra en una situación comparable.
Ejemplo: “Una mujer y un hombre que trabajan en una oficina como auxiliares administrativas. A la mujer se le adjudica la tarea de preparar el café cada día.”
La discriminación indirecta por razón de sexo-género hace referencia a una disposición, criterio o práctica aparentemente neutra que sitúa a las personas de un sexo-género determinado en desventaja particular respecto a otra persona de su sexo-género. A menos que, esta disposición, práctica o criterio se pueda justificar con una finalidad legítima y que los medios para conseguir esta finalidad sean adecuados y necesarios.
Ejemplo: “Una mujer y un hombre que trabajan en una oficina como auxiliares administrativas. Cuando hay que enviar a alguien a dialogar con personas de otra empresa, “casualmente” siempre se envía al hombre. Porque “casualmente” sus horarios son más flexibles”
Algunos testimonios sobre desigualdades laborales vividas por las mujeres (14/2/2017)