Color y Forma
El color y la forma actúan psicológicamente de modos que ni siquiera imaginamos, según estudios realizados por Rorschach las personas con carácter alegre tienden a responder al color, mientras que aquellas que tienden a la depresión reaccionan más a la forma. Dentro de un escaparate no podemos puntualizar estos conceptos porque los transeúntes abarcan todas las posibilidades, por lo tanto, hay que lograr equilibrar ambos para no dañar la percepción de la mayoría. Es por esto que, teniendo en cuenta que los límites de las formas dentro de una vidriera los da el color, debemos diferenciar cuál de los des va a tener protagonismo:
- Podemos hacer un escaparate monocromático donde la armonía está dada por el uso de un mismo color variando las intensidades del mismo.
- Podemos atraer con un contraste dentro de colores neutros, por ejemplo, un objeto rojo entre negros y blancos.
- Podemos formar un conjunto de contraste, teniendo en cuenta en no excedernos en la superficie de uno u otro color, en este caso entra en juego el peso del color (mencionado anteriormente) y el punto donde queremos dirigir la mirada de nuestros interesados.
No es lo mismo colocar en una vidriera una esfera de color amarillo que un cuadrado azul.