Los dos momentos más delicados
¡Ten mucho cuidado con estos dos momentos!
En cualquier entrevista de trabajo tienes que estar muy atento a los dos momentos cruciales de los que nadie te hablará:
ANTES DE ENTRAR POR LA PUERTA.
Ten mucho cuidado con quien hablas y lo que le dices mientras esperas. Puede que la entrevista comience precisamente ahí, con un supuesto compañero que también está esperando para ser entrevistado y que en realidad es otro entrevistador.
ANTES DE SALIR POR LA PUERTA.
Ya crees que ha finalizado la entrevista ¿verdad?, te sientes más relajado, el entrevistador lo sabe, y es precisamente ahora cuando puede hacerte la pregunta clave, así que:
¡No bajes la guardia hasta salir por la puerta!
- Las entrevistas suelen acabar con la tradicional frase: “Ya te llamaremos”.
- Da las gracias, si el entrevistador te ofrece su mano, estréchasela y márchate.
SIGUE APRENDIENDO.
- Has tenido una experiencia de la que puedes aprender mucho.
- Una vez que la entrevista haya concluido busca inmediatamente un lugar apartado y tranquilo y anota sinceramente todo lo que has percibido durante la entrevista: la actitud del entrevistador, la tuya, las preguntas que te han formulado y tus respuestas, tus aciertos y equivocaciones, tus dudas, si te sentiste cómodo o en un interrogatorio…
- Trata de aprender todo lo que puedas de este proceso por el que has pasado para una próxima ocasión.