Gestionar sentimientos
Sentir es algo que nos hace estar vivos, algo innato al ser humano. Cuando ese sentir se manifiesta de forma fortuita e intensa implica una energía que debemos gestionar de forma adecuada para que no nos perjudique ni a nosotros ni a los demás. Este es el mensaje para transmitir a los jóvenes cuando les hablemos de emociones y sentimientos.
Gestionar los sentimientos no es:
- Evitarlos.
- Olvidarlos.
- Dejarse llevar por ellos.
Es habitual que los adolescentes reaccionen con respecto a sus sentimientos de una de estas tres formas. Destaco la última citada porque se suele repetir en ciertos medios de comunicación y redes sociales como un "mantra": "yo hago lo que me pide mi corazón". Planteamientos como este constituyen no sólo un error personal sino un peligro que deja desprotegidos a nuestros jóvenes de males mayores.
Gestionar los sentimientos es:
- Tomar conciencia de su existencia.
- Permitirse su existencia.
- Encauzarlos.
- Aprovecharlos en positivo para la vida personal.
Tenemos que conseguir que nuestros jóvenes se alíen con sus sentimientos y les reconozcan como parte de sí mismos, dominándolos y no dejándose llevar por ellos.
Una propuesta de gestión de emociones sería la siguiente:
1. Identificación.
2. Racionalización.
3. Actuación.
Pasaremos a explicar estos pasos en los capítulos siguientes.