Una buena lactancia materna - Video
De sobra son bien conocidos los beneficios de la lactancia materna, algunos de ellos son:
- Mayor aporte nutritivo con menor sobrecarga metabólica.
- Estimula el desarrollo del sistema inmune del recién nacido.
- Estimula sistemas enzimáticos y metabólicos específicos que logran la programación nutricional, intestinal, enzimática y metabólica para el futuro.
- Mayor vínculo afectivo.
- Ventajas sobre la salud de la madre con un puerperio más fisiológico, retrasando la ovulación, disminuyendo sangrado posparto y con mejor recuperación posterior de las reservas de hierro. Menor incidencia de tumores ováricos y mamarios premenopáusicos.
- Ahorro económico para los servicios sanitarios y la sociedad.
- Comodidad para la madre y sin riesgos derivados de la preparación de las fórmulas de inicio.
Los puntos importantes para una buena lactancia materna son los siguientes:
- La madre debe estar en posición tumbada o sentada y muy relajada.
- Tiene que respirar lentamente y que los hombros no estén tensos.
- Si está tumbada, debería emplear almohadas y cojín de lactancia.
- Si la madre está sentada, puede usar el cojín para apoyar al bebé o los pechos pesados durante el momento de dar el pecho.
- Al poner al bebé al pecho la madre NO debe poner los dedos cerca del pezón o la areola, porque es ahí precisamente donde el bebé debe agarrarse.
- El bebé tiene que tener el cuerpo totalmente vuelto hacia su madre, es una posición de "vientre contra vientre".
- Al acariciar el labio del bebé con el pezón, el pequeño abre la boca, en cuanto abra la boca hay que colocar al bebé con cuidado pero rápido.
- La primera succión del bebé puede ser bastante dolorosa, pero es un dolor que desaparece al rato. Señala que a partir de ese momento el pezón se encuentra suficientemente bien entrado en la boca.
- Un dolor continuado es señal de que el bebé no está mamando bien.
- Los chasquidos secos indican que el pezón no ha entrado por completo en la boca y que el bebé está chupando o mordisqueando. En este caso, lo mejor es separarlo y volver a colocárselo en el pecho.
- Hay que probar varias posiciones, para ver cuál es la que más se adapta a la madre. Sobre todo que esté cómoda y que no se le queden dormidas las manos ni piernas.
- Hay que tener paciencia, ¡no se nace sabiendo! En el plazo de dos semanas verás como todo va viento en popa y encontrarás la mejor manera de darle el pecho.
Agarrarse al pecho