Arte Naif

El naif es un movimiento pictórico que surge a finales del siglo XIX o principios del XX en Francia y que jugará un importante papel en la evolución del arte moderno.

Naif es una palabra francesa que hace referencia a lo ingenuo, pero no desde un punto de vista negativo o despectivo, sino que se refiere a la ingenuidad desde un punto de vista más amable, en ausencia de cualquier tipo de maldad.

Esta pintura se desarrollará por un grupo de artistas que no tienen en la pintura su principal ocupación ni su medio de vida (de hecho, su principal exponente, Henri Rousseau, trabajaba en la oficina de aduanas de París), sino que pintan por el placer de pintar, sin haber estudiado técnica alguna, es decir, sin formación específica, siendo principalmente autodidactas y por tanto teniendo poca técnica sus obras

Será precisamente la espontaneidad con la que se realiza lo que acabe por darle importancia.

En sus obras van a transmitir tranquilidad, sencillez e inocencia, van a desarrollar una estética de carácter eminentemente infantil, representando principalmente una temática ligada a la vida campesina, la vida familiar, las tradiciones y los pasajes religiosos.

Entre sus principales características pictóricas están la ausencia de perspectiva; la excepcional definición de los contornos, que son remarcados; el colorido tan vivo que usan en sus obras, así como el gusto por pintar hasta el más mínimo detalle.

Los principales exponentes de esta corriente son:

Henri Rousseau:

Sus principales obras son: