De la Gran Depresión de 1873 a la II Revolución Industrial: Proteccionismo económico y concentración empresarial

Una de las grandes transformaciones a causa de la Gran Depresión de 1873 fue el cambio en las estructuras empresariales y económicas; especialmente las referentes al control del comercio mediante la concentración empresarial, y el proteccionismo económico.

En lo que a proteccionismo económico se refiere debemos decir que se trató por todos los medios de que los productos que llegaban desde el extranjero, y que lo hacían con un precio inferior de mercado con respecto al que se producía en el país receptor, una vez pasaban por la aduana se convertían “como por arte de magia” en un producto más caro que el producido nacional.

Esto era posible gracias al gravamen que sufrían, pues se les aplicaban tasas e impuestos diversos que hacían que su precio incrementase desorbitadamente, por lo que siempre sería más barato el mismo producto producido en el propio país que el que venía de ultramar u otros países colindantes.

J.P.Morgan.

Si nos fijamos en el tema de la concentración empresarial, vimos que habían diversas formas de llevarlas a cabo: trusts, holdings, o cárteles; pero no profundizamos en cada uno de ellos.

Así, los holdings sería la manera por la que los bancos entrarían en las empresas, son sociedades financieras que van a invertir en empresas; siendo un claro ejemplo el de J.P. Morgan.

Los trusts serían la unión de empresas que se dedican a la misma actividad (horizontal) o las diferentes actividades complementarias de todo un proceso productivo (vertical), tendiendo a monopolizar y controlar un sector económico, imponiendo los precios de venta y la producción; ejemplos de estas uniones serían la Standard Oil Trust en el campo del petróleo (que dio origen a determinadas leyes para evitar estos monopolios), Ritz en el de los hoteles, Ford, etc…

Acción de la Standard Oil Company.

Los cárteles estarán formados por empresas de un mismo sector o producción que acuerdan entre ellas un precio para sus productos, eliminando la competencia, regulando la producción y repartiéndose la clientela; como la OPEP (Organización de países exportadores de petróleo).