Prólogo

Hemos dedicado este curso de manera especial a personas cuidadoras de pacientes con demencia senil (cuidadores familiares y profesionales). Creo, de todas formas, que también puede ser útil para aquellos/as profesionales sanitarios que estén interesados en esta terrible enfermedad, sobre todo en el manejo del trastorno.

Nuestro mayor esfuerzo lo ha constituido la búsqueda continua de una manera sencilla de explicar las cosas evitando, en la medida de lo posible, el uso de tecnicismos y de palabras que puedan conllevar dificultad de comprensión para los que no sean profesionales sanitarios.

Hemos necesitado infinidad de horas para encontrar los contenidos más actualizados en los buscadores médicos y guías de mayor prestigio de los que disponemos en la actualidad los sanitarios de todo el mundo. Por tanto puedo decir, con total convencimiento, que la información que exponemos en el curso está totalmente actualizada a día de hoy.

Para aquellas personas sin ánimo ni ganas de leer contenidos puramente teóricos (que he considerado importantes antes de empezar a hablar de los cuidados de la demencia propiamente dichos), mi consejo es que empiecen a leer por el tema 9, es decir, por la segunda parte del trabajo que ya es, propiamente, más "entretenida" y que es la auténtica razón de ser de este curso.

Pienso que mi experiencia en el manejo del paciente con demencia (que abarca la mayor parte de mi carrera profesional y que he ejercido tanto a nivel de residencias geriátricas de la comunidad de Madrid como a nivel de domicilios privados), me ha permitido vivir el día a día REAL del paciente enfermo con dicho trastorno que, por desgracia, con muchísima frecuencia tiene poco que ver con lo que nos cuentan en los libros, artículos, tratados y demás "fuentes de conocimiento" del mundo de la geriatría,  neurología y psiquiatría.

Siempre me ha "fascinado" y, en buen medida, indignado, la tremenda soledad del "pobre" cuidador que, falto de ayuda y de consejo para los momentos de mayor declive anímico y físico del paciente, se ve "solo ante el peligro" y que, finalmente, puede acabar más enfermo que el propio enfermo...

Para contribuir a aliviar (aunque solo sea "un poquito"), un drama que es y que será cada día más frecuente, he escrito este curso... como se dice habitualmente, "espero haberlo conseguido".