Dilemas teóricos en la investigación: ¿solucionar o problematizar?
Un dilema de carácter genérico pero con consecuencias completamente visibles es el de la oposición solución vs problema. Es decir, a la idea tradicional de que se investiga para dar solución concreta a una problemática (asociado al método cuantitativo por excelencia) se opone la idea de investigar para buscar problemáticas que luego puedan ser abordadas (metodologías generalmente cualitatitativas).
Indudablemente dos caras de una misma moneda (el proceso de investigación en su totalidad) pero que nos colocan ante realidades absolutamente diferentes.
Tradicionalmente la investigación en educación se dedicó a buscar soluciones a problemas concretos: la alfabetización, la deserción escolar, el bajo rendimiento, etc. Es la misma línea que yo mismo trabajo: analizo de forma cuantitativa la deserción en primeros años de carreras de nivel superior, proponiendo como solución la implementación de la enseñanza del vocabulario de manera directa. De principio a fin mis investigaciones buscan mejorar de forma homogénea el rendimiento de una masa poblacional que son "los ingresantes", y naturalmente estoy dejando fuera variables que exceden a la institución (por ejemplo aspectos motivacionales o socioeconómicos, por considerar que están fuera del alcance institucional). A favor: la metodología es sólida, la estadística da un buen apoyo y se obtienen conclusiones con alto grado de extrapolación. En contra: la realidad educativa es tan compleja que, incluso teniendo soluciones, no siempre es posible aplicarlas o incluso tratar de ponerlas a dialogar. La crítica más común a este tipo de investigaciones es que no llegan a ser suficientemente amplias como para dar soluciones, y muchas veces se quedan con verdades estadísticas de poca viabilidad.
A esta forma de investigar se oponen los nuevos paradigmas de investigación educativa que plantean lo siguiente: los problemas que se han investigado tradicionalmente no tienen solución sino a partir de la comprensión de las problemáticas inherentes a las relaciones humanas que se dan en el seno de las instituciones y la sociedad misma. Es decir: problemas de seres humanos, requieren soluciones humanas, que tomen en cuenta las percepciones e ideas que los actores tienen sobre el proceso. En estas investigaciones se busca poner en evidencia la complejidad de factores que inciden en el fenómeno educativo, y a partir de este análisis problematizador, encontrar perspectivas totalizadoras que puedan tratar el problema. Se tiende a lo general en este tipo de investigaciones, pues se considera que tratar solo un aspecto reducido es perder perspectiva. A favor: su profundidad es tal que suelen ser muy precisas a la hora de identificar problemas, sus causas y posibles soluciones. En contra: tienen tan poco grado de extrapolabilidad que terminan siendo trabajos particulares, con poco valor para la comunidad científica general, sus conclusiones son ciertas solo para el caso que trabajan. La crítica más habitual que se le realiza a estas investigaciones es que en el fondo no proponen nada.
¿Qué hacer entonces? En un curso anterior lo dije, y lo repito brevemente: cada problemática particular, demanda un método particular, de acuerdo a su vez a las necesidades del investigador. Se hará lo que se deba y lo que se considere apropiado. Después de todo problematizar y solucionar son un continuum en la investigación