Usos y aplicaciones
El alto rendimiento que se obtiene en la transformación de la energía en electricidad, contenido en los ríos y cauces de agua, es muy alto. Por eso la energía hidráulica como fuente de energía se usa casi exclusivamente en la producción de electricidad.
Las centrales hidroeléctricas tienen aplicaciones muy diferentes según las necesidades energéticas que existen en la zona donde se instalan, aunque fundamentalmente se empleen en la generación de electricidad para venderla a la red posteriormente.
Los diferentes usos y aplicaciones que se pueden dar son:
- Rehabilitación de viejas centrales inactivas o antiguos molinos.
- Ampliación de centrales existentes.
- Construcción de nuevas centrales sobre conducciones de agua potable o en instalaciones en aguas residuales.
- Integración en canales de riego.
- Nueva construcción en tramos de río libre o pie de grandes presas existentes.
- Aprovechamiento de los caudales ecológicos de grandes presas.