El romance de los siglos IX, X, XI
El romance de los siglos IX, X, XI
El español primitivo de los estados cristianos nos es conocido gracias a documentos notariales que, si bien pretenden emplear el latín, insertan por descuido o ignorancia formas, voces y construcciones de romances.
La lengua vulgar aparece usada con plena conciencia en las "Glosas Emilienses" y en las "Glosas Silenses". Unas y otras datan del siglo X y están en dialecto navarro-aragonés.
Los monjes que los consultaban apuntaron al margen la traducción de palabras y frases cuyo significado no les era conocido.
Las Glosas no son el primer intento de escritura vulgar; para componerlas los anotadores manejaron una especie de diccionario latino-romance, no conservado, por desgracia.
El español primitivo carece de fijeza. Coinciden en el habla formas que representan diversos estados de evolución.
El medio de una coexistencia de normas (en el espacio de pocas líneas las Glosas Emilienses por ejemplo, tres grados distintos de pretérito), al parecer caótica, la evolución lingüística avanza con pasos lentos, pero firmes.
Poco a poco se van eliminando arcaísmos y disminuye la anarquía. De este modo se prepara el camino para la fijación de criterios que llegará como fruto del cultivo literario.
A causa de la inseguridad del lenguaje y de la natural aspiración a hablar bien, eran frecuentes los errores de falsa corrección, pues no había idea clara de las formas que debían emplear.
El siglo XI influencia francesa primeros galicismos
En los estados norteños aparecen síntomas de renovación. La dinastía leonesa tradicionalista decae mientras crecen Castilla y Navarra. Afluyen a Compostela los innumerables devotos europeos, la abundancia de franceses da a la ruta el nombre de "camino francés".
El rito visigodo es sustituido por el romano, desaparece la escritura visigoda y en lugar suyo se emplea la carolingia. El arte mozárabe sigue la arquitectura románica.
En el lenguaje entran muchos términos provenzales y franceses: homenaje, mensaje, vergel, mezón, argent, viandas, vinagre. La introducción de galicismo no había de cesar ya en toda la edad media.
La influencia lingüística de los inmigrantes francos favoreció la apócope de la "e" final en casos como part, mont... A mediados del siglo XIII habían adquirido gran difusión.
Semejanzas y caracteres del castellano
Los dialectos eran: al norte el gallego portugués, el leonés, el castellano, el navarro- aragonés, el catalán; al sur los dialectos mozárabes que aislados de los demás y cohibidos por el uso del árabe como lengua culta, tuvieron una evolución muy lenta .
Son una preciosa reliquia del romance que se hablaba en los últimos tiempos del reino visigodo.
Formación y caracteres del castellano
Era Castilla vértice donde habrían de confluir las diversas tendencias del habla peninsular. El lenguaje de Castilla adoptó las principales innovaciones que venían de las regiones vecinas, dándoles notas propias.
La toponimia rebela que el factor vasco fue poderoso.
Se apartaba de los demás romances peninsulares por el especial tratamiento de muchos fonemas latinos, difería del resto de España en el paso de la f inicial a la h aspirada, hoja, hijo, hoz.
El leonés y el aragonés se estancaban en las formas castiello, siella, el castellano acompañado en esto por el mozárabe emprendía la reducción de ie a i ante la l, castillo, silla. El grupo it daba la ch castellana hecho, leche, cuando los otros romances hispánicos decían feito, leite.
Desconoce las vasilaciones puorta- puerta- puarta, propias del leonés y aragonés escogiendo desde el primer momento puerta.
Variedades regionales del castellano
Cantabria origen de Castilla cántabra retenía arcaísmos que decaían o habían desaparecido en Burgos.
La península quedó repartida en cinco fajas que extendían de norte a sur. La central de dialecto castellano se ensanchaba por Toledo, Plasencia Cuenca Andalucía y Murcia, rompiendo el primitivo nexo que unía antes los romances del oeste con los del oriente hispánico.
La cuña castellana quebró la originaria continuidad geográfica de las lenguas peninsulares. Después el castellano desterró los dialectos leonés y aragonés mediatizó al gallego y al catalán, y procuró de este modo la moderna unidad lingüística española.
La época de Alfonso el Sabio
Creación de la prosa romance, Alfonso el Sabio
La construcción se reduce casi a una sucesión de oraciones simples enlazadas por la conjunción copulativa. A mediados del siglo XIII la frase va haciéndose más variada, augurando el próximo florecimiento de la prosa.
En 1252 don Alfonso heredaba el trono de Castilla y León. Su reinado es un período de intensa actividad científica y literaria dirigida por el mismo rey.
Entorno a Alfonso X se congregan juglares y trovadores, jurisconsultos, historiadores y hombres de ciencia. Fue decisiva la intervención del rey que no se contentó con tener enmendadores del lenguaje sino que actuó de forma personal en la corrección.
La grafía quedó establecida hasta el siglo XVI, la transcripción de los sonidos españoles se atienen a normas fijadas por la cancillería y los escritos alfonsíes.
La labor de Alfonso X capacitó el idioma para la exposición didáctica. Tuvieron que ser abordados dos problemas fundamentales, referentes a la sintaxis y el léxico.
Se requería de disponer de una frase más amplia y variada que la usual; la frase se alarga complicada en oraciones incidentales, sin que se pierda el hilo de la idea directriz.