Antijudaísmo
Los judíos fueron, para el régimen nazi, los culpables de todos sus males, por ello, debían ser quienes pagasen las consecuencias. Comenzó a desarrollarse un odio visceral hacia su pueblo, pues entendían que eran los responsables de la corrupción de la pureza tanto cultural como biológica del pueblo germano. De este pueblo se llegó a decir que "la depravación es nota definitoria del pueblo judío" (La cuestión judía, 1880).
No fueron los únicos aportes, considerando el peor de todos el de Paasch, quien propuso la deportación de todos los judíos a Nueva Guinea o, en su caso, su exterminio total, claro antecedente de lo que vendría después y que se conocería como "la solución final".