Alfil y peón contra dos peones
Finales de Alfil
Alfil y peón contra dos peones
(Guillermo Gutiérrez)
En este final, las blancas logran el empate maniobrando con el rey con suma precisión. Veamos.1.Re4! (Es un error jugar 1.Rd4? ya que entonces las blancas perderían luego de 1...Ac5+ 2.Re4 Ae3! y las blancas ya no pueden realizar la maniobra que les brinda las tablas) 1...Ad2 2.Rd3! (también es un error jugar aquí 2.Rd4? porque las blancas pierden luego de 2...Ac1 3.Re4 Ae3) 2...Ac1 3.Rd4! Ae3+ 4.Re4 Re7 5.Rf5 Ad2 6.Re5 Ac1 7.d6+! (7.Re4? Rf6 8.Rd4 Rf5 9.d6 Re6 10.Rc5 Aa3+ ganando) 7...Rd7 8.Rd5 Aa3 9.Re4 y tablas! ya que luego de 9...Axd6 el peón negro desaparece con la jugada 10.e3 Este ejemplo nos ha servido para dar a conocer un caso curioso de conjugación de los escaques del alfil y del rey. Estando el alfil negro en d2, el rey blanco debe hallarse en d3; cuándo él se encuentre en c1, éste debe estar en d4 y, finalmente, si el alfil se sitúa en e3, el rey debe estar en e4. Las blancas consiguen mantener la conjugación y hacen tablas. ½–½
(41) Finales de Alfiles
Alfil y peón contra dos peones (3)
(Guillermo Gutiérrez)
La siguiente posición nos servirá para conocer un método de obtener la victoria cuando no se tiene el peón pasado. Las blancas se dirigen con el rey hacia los peones enemigos. Al mismo tiempo deberán cuidar atentamente de que el adversario no efectúe el cambio de su único peón. La partida prosigue así: 1.Rb4 (Sería erróneo en este momento jugar 1.Af4? por la respuesta negra de 1...c5! 2.Ra4 Rc6 3.Ag3 d5 y las negras logran cambiar el único peón blanco, por lo que la partida finaliza en tablas).1...Rb7 2.Ra5 d5 (ante la jugada 2...Rc7 se puede responder con 3.Ra6 Rd7 4.Rb6 c5 5.Af4 Re6 6.Rc6 y las blancas ganan) 3.c5 Ra7 4.Rb4 Rb7 (Si las negras juegan en este momento 4...Ra6 puede proseguir la variante así: 5.Rc3 Rb5 6.Rd4 Rb4 7.Re5 Rc4 8.Rd6 y las blancas tienen nuevamente una posición ganadora) 5.Rc3 Rc7 6.Rd4 Rd7 7.Re5 Re7 8.Ag5+ Rd7 9.Af6 Rc7 10.Re6 Rc8 11.Rd6 Rb7 12.Rd7+- y las blancas ganan.
