el origen de la expresión "no hay tu tía"
Usamos la expresión “no hay tu tía” para hacer ver que algo no tiene remedio o solución posible.
El origen de la expresión deriva directamente de la palabra “atutia”, que no era otra cosa que un polvo (óxido de cinc) que se formaba en las fundiciones de cobre y que se recogía para darle posteriormente un uso medicinal en las farmacias, pues con él como compuesto se realizaban diferentes remedios.
Por esta razón era frecuente que el farmacéutico dijese más de una vez a la clientela algo así como “no hay atutia”, para indicar que ciertos remedios no estaban disponibles; derivando al uso actual.
Por cierto, que en la actualidad se escribe de manera errónea, pues se recomienda escribir la expresión de la siguiente manera “no hay tutía”, y no como lo hemos hecho nosotros en el título de este artículo.