Edgar Allan Poe
Edgar Allan Poe es uno de los principales escritores de la historia de la literatura estadounidense y universal, destacando en los campos de la poesía y los relatos cortos, además de como crítico literario.
Su obra va a representar una huida de la realidad, creará mundos imaginarios y mezclará a partes iguales el terror y el amor, influenciado tremendamente por la literatura gótica alemana.
Lo macabro, lo claustrofóbico y oscuro predominará en su obra, expresando sus preocupaciones y miedos, su particular infierno.
Edgar Allan Poe.
Nació en Boston el 19 de enero de 1809, en el seno de una familia de actores, pero el temprano fallecimiento de su madre y el abandono por parte de su padre hizo que viviese con una familia de acogida hasta que se marchó a la universidad en 1826, de donde será expulsado.
Sus primeros años de vida marcarán la personalidad de Poe, sintiéndose un inadaptado y teniendo problemas por el consumo de alcohol y otras sustancias prohibidas.
Desde pequeño le fascinó la lectura, especialmente la poesía, lo que hizo que fuese un escritor autodidacta, y que adquiriese una amplia cultura, que posteriormente volcará en sus diversas obras.
En 1827 escribirá “Tamerlan”, su primera obra; en 1829 publicará “Al Aaraaf” y en 1832 “Poemas” y “Metzengerstein”; poco a poco empezará a ganar cierta notoriedad lo que le llevará incluso a ganar un premio literario dotado con 50$ con su obra “Manuscrito encontrado en una botella” (1833).
Contraerá matrimonio con su prima (que por aquel entonces tenía 13 o 14 años) y en 1835 trabajará como crítico en una revista literaria que le granjeará fama de incisivo y mordaz, gracias a la cual conseguirá similares trabajos en otras tantas publicaciones.
Sus cada vez más frecuentes contactos con el alcohol y las drogas empiezan a hacer huella en él, cada vez son más frecuentes las borracheras y las resacas de 4 o 5 días en los que no acude al trabajo, por lo que acumulará despidos y problemas de salud.
En 1839 ve la luz “Cuentos de lo grotesco y lo arabesco” y en 1845 “El Cuervo”, una obra con la que ganará fama a lo largo y ancho de Estados Unidos, en la que un cuervo que habla visita a un amante apenado al que aviva su sufrimiento repitiendo siempre las mismas palabras “Nunca más”, lo que llevará al protagonista poco a poco hacia la locura.
En 1847 fallece su esposa (año en el que publica otras obras destacadas, “Eureka” y “Ulalume”), algo que termina de empujarle al abismo de la autodestrucción, en el que permanecerá hasta su muerte el 7 de octubre de 1849.
Edgar Allan Poe (1848).
Su legado literario nos dejará obras de terror magníficas como “La caída de la casa Usher” (1839), “Los crímenes de la calle Morgue” (1841), “El pozo y el péndulo” (1842), “El entierro prematuro” (1844), Hop frog” (1849), etc… obras en las que la claustrofobia, el terror, la venganza, los enterramientos en vida, el incesto, y los ambientes irrespirables son la nota predominante junto a lo macabro.
Su obra “Los crímenes de la calle Morgue” (1841) y la creación del detective Auguste Dupin, un hábil e inteligente detective, con un gran poder deductivo que esclarecerá los misteriosos asesinatos de una manera brillante; y que repetirá protagonismo en otras obras posteriores de Poe como “El misterio de Marie Roget” (1842) y “La carta robada” (1844); serán el germen del género policíaco.
También escribió diversos relatos basados en el futuro, por lo que también se le considera el precursor de la literatura de ciencia ficción.
Sin embargo no se prodigó en el campo de las novelas, pues tan solo escribió una, “La narración de Arthur Gordon Pym”, una obra macabra y polémica influenciada por leyendas marineras ancestrales.
Realmente el género que cautivó a Poe fue la poesía, sus primeras obras son poesías y sus últimas también, aunque no lo cultivó todo lo que hubiese querido ya que como el mismo autor dijese “Razones al margen de mi voluntad me han impedido en todo momento esforzarme seriamente por algo que, en circunstancias más felices, hubiera sido mi terreno predilecto”.
Sus principales obras serán ”Ulalume” (1847) sobre la pérdida de un amor y la desolación que produce, y “Annabel Lee” (1849) escrita en recuerdo de su esposa fallecida.
Ulalume (1847).