Condiciones para la relajación
- Buscar un lugar silencioso y solitario.
- Escoger, si se puede, un ambiente natural como el azul del cielo y el verde del campo (que son los colores más relajantes).
- Conseguir un ambiente de poca luz u oscuro que nos proteja de la distracción que provoca la luz.
- Evitar las molestias tanto del calor como del frío, pues uno y otro impiden la concentración.