Procesos de descolonización en el siglo XX. Factores determinantes.
La I Guerra Mundial supuso un antes y un después en ciertas colonias africanas y asiáticas que estaban subyugadas por potencias europeas, despertando una conciencia de libertad e independencia que tomaría fuerza con el paso de los años, y especialmente tras la II Guerra Mundial.
Pero este proceso independentista no sería fácil, ni estaría exento del derramamiento de sangre de cualquier conflicto, pues las potencias colonizadoras se resistían a perder sus posesiones.
Sin embargo, será imparable y se verá favorecido por varias circunstancias.
El agravio comparativo entre éstas y las naciones europeas, pues tras las invasiones de Hitler a ciertos países europeos durante la II Guerra Mundial, se veía como algo lógico y coherente el resistir ante la ocupación extranjera... por lo tanto, las colonias estaban en la misma situación que estos países, no debiendo haber ninguna diferencia entre los de un continente y los de los otros.
Estados Unidos y la Unión Soviética se mostrarán contrarios a la existencia de colonias también, probablemente debido a que de esta manera ambas potencias podían sacar mayores beneficios económicos (entre otros), al no depender estos países de otros con los que se generaría algún tipo de conflicto indeseado.
Gran Bretaña, Holanda y Francia (principales países coloniales en estos momentos) estaban tremendamente debilitadas tras el conflicto, y sus fuerzas no eran las más idóneas para mantener luchas con sus colonias; que aprovecharon la citada debilidad para imprimir un carácter más intenso a sus exigencias.
Finalmente la postura de la Naciones Unidas, a favor de la libre determinación de los pueblos... sin olvidarnos de las campañas mediáticas, los medios de comunicación, etc... que influirían también en la opinión pública de los ciudadanos.