Revolución Verde

La denominada “Revolución Verde” surge a partir de 1963, tras un período de escasez de alimentos a nivel mundial debido en parte al devastador conflicto de la II Guerra Mundial, y al crecimiento demográfico que sufre el planeta.

Se empiezan a cuestionar los procesos agrícolas y de cultivo tradicionales, que se antojan insuficientes para poder alimentar a la población mundial, por lo que la FAO (Organismo dependiente de las Naciones Unidas para la agricultura y la alimentación) comienza a impulsar una serie de cambios para aumentar de manera más que notable la producción agrícola (como así fue).

Se llevó a cabo con el apoyo, de entre otras entidades privadas, de la Fundación Ford y la Fundación Rockefeller.

Esta revolución consigue sus objetivos, aunque se cuestiona su impacto ambiental, entre otros motivos, por la gran cantidad de energía que necesita para producir alimentos.

Será el antecedente del sistema agroalimentario actual, basado en el desarrollo de fertilizantes y pesticidas químicos, semillas mejoradas y modificadas genéticamente de alto rendimiento que no se pueden reproducir, especialización geográfica, monocultivos, biotecnología moderna, etc...

Es indudable que con este sistema se ha conseguido el objetivo de producir alimentos suficientes para toda la población del planeta... si el reparto de los recursos fuese justo (hay para todos, pero no llega a todos); originando también el debate de la ética alrededor de la modificación genética de semillas, etc...

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